5 razones para desarrollar la inteligencia emocional

La inteligencia emocional nos otorga el poder de regular y dominar nuestras emociones para reaccionar de forma ecuánime e inteligente ante las situaciones que nos ponen bajo estrés y mucha presión.

La inteligencia emocional implica el desarrollo de 4 habilidades:

  1. La primera: reconocer las emociones que sentimos en nosotros mismos y sus causas, y reconocer las que vemos en los demás y sus causas.
  2. La segunda: la capacidad de comprender el efecto que tienen esas emociones en la toma decisiones, es decir, en la forma en que reaccionamos nosotros y en la forma en que reaccionan los otros.
  3. La tercera: la capacidad de regular y dominar esas emociones para que nuestras reacciones sean acertadas.
  4. La cuarta: la capacidad de inducir emociones positivas para mejorar las atmósferas emocionales y lograr ambientes creativos y colaborativos.

Veamos las 5 buenas razones/beneficios que trae entrenarse en este tipo de inteligencia.

1. Nos enseña a gestionar la frustración de nuestros errores y fracasos.

Como dice Garry Kasparov, campeón mundial de ajedrez de 1985 a 2000, “debemos aprender a frustrarnos menos y aprender más de las metidas de pata”. Lo común, dice Kasparov, es que la gente culpe a su entorno, y eso es lo que nos pasa cuando no nos hemos entrenado bien en habilidades de inteligencia emocional. Incluso, terminamos culpando a la punta de la cama cuando nos tropezamos con ella.

Esta forma de reaccionar, que nos deja desalentados, desorientados y bloqueados frente a las circunstancias, podemos transformarla en una oportunidad de aprendizaje, de cambio, y de entusiasmo cuando aprendemos a gestionar la frustración de forma adecuada.

2. Nos da mayor dominio sobre la rabia.

Cuando no sabemos regular la rabia, esta se convierte en el disparador de comportamientos impulsivos que nos llevan a perder el control, y que, normalmente, terminan en oleadas de remordimiento. Como consecuencia, proyectamos una imagen déspota, inconsistente en sus reacciones, y, por lo tanto, poco confiable frente a los demás. Adicional a este efecto, nos deja desgastados y cansados por la cantidad de energía que se quema cuando sentimos rabia de forma constante.

Cuando aprendemos a gestionar esta emoción, a reconocerla, comprenderla y regularla, entonces podemos tener reacciones más ecuánimes que siempre tendrán mejores resultados.

3. Nos ayuda a construir relaciones estables, positivas y basadas en la confianza y en el respeto.

Uno de los grandes beneficios que trae la inteligencia emocional es que nos da la capacidad de relacionarnos fácilmente con las personas, aún con las que parecen más difíciles de sobrellevar.

Construir relaciones amables, confiables y fluidas, no solo nos hace el trabajo más fácil, sino más disfrutable, y, además, es la base para conseguir los objetivos profesionales que nos planteemos. Según los estudios realizados por Daniel Goleman, el 67% de las habilidades asociadas a un buen desempeño laboral, están relacionadas con la inteligencia emocional. Es por esto, que se ha posicionado como una habilidad que está en el TOP 5 de competencias evaluadas por las empresas al momento de seleccionar a su personal y promoverlo a puestos de mayor nivel.

4. Nos da la capacidad de potenciar la creatividad, la colaboración y el aprendizaje.

Una de las habilidades de la inteligencia emocional implica saber utilizar las emociones positivas para mejorar los procesos cognitivos. Esto quiere decir, que al inducir emociones positivas, el cerebro potencia su capacidad de aprender, solucionar problemas e inventarse cosas, haciéndonos un 300% más creativos, un ingrediente fundamental para avanzar y superar cualquier obstáculo que se nos presente en el camino.

Para nadie es un secreto que cuando nos sentimos alegres estamos más motivados e inspirados a hacer nuevas cosas y a colaborar con los demás.

5. Nos hace mejores analistas de comportamiento.

Otra de las razones/beneficios que nos trae aprender inteligencia emocional es que nos ayuda a ser más conscientes de las emociones que vemos en los demás, y nos lleva a preguntarnos las causas de estas emociones, para reaccionar de forma más inteligente a lo que estamos percibiendo, ayudándole a los demás a reducir las emociones negativas. Esto es importante porque cuando reducimos las resistencias emocionales que percibimos en los demás, reducimos el 90% de las barrera para llegar a acuerdos.

Si estás listo para empezar, te invitamos a unirte a nuestro curso de inteligencia emocional.

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